Las empresas necesitan amor.

Hablar de amor en el mundo empresarial puede parecer fuera de lugar. 
Sin embargo, considero que el amor tiene un papel fundamental en la creación de empresas exitosas y sostenibles en el tiempo. 

El amor está estrechamente relacionado con la pasión y el propósito. 

Cuando amas lo que haces, eres capaz de comprometerte con tu trabajo y estás dispuesto a superar obstáculos con determinación. 

Cuando amas lo que haces, sientes cómo te sube la energía, cómo fluye tu creatividad, sabes que estás en tu elemento, como decía Ken Robinson. 

Esta pasión intrínseca lo es TODO. 

Cuando decimos que una empresa tiene alma, es porque esa empresa fue creada desde el amor. El amor que los fundadores (uno o varios) tenían por la actividad que realizaba la empresa. 

La pregunta que me hacen después normalmente es… 
¿Pero, cómo sé si siento ese amor? 

Si estás conectado contigo mismo lo sabes. Si hay verdad en ti, lo notas. El amor no se puede camuflar, el amor es CLARIDAD.

Si te haces esa pregunta es porque no lo sientes. No sientes ese amor hacia la actividad que realiza tu empresa o hacia la empresa en general. 

Entonces… ya sabes lo que tienes que hacer. 
TRABAJAR EN TU INTERIOR. 

Descubre qué pasa dentro de ti, aprende a escuchar a tu corazón, deja de simplemente aparentar y empieza a sentir. 

El amor en una empresa proviene de la autenticidad y la autenticidad proviene de la conexión interna que tengan las personas que llevan adelante esa empresa y del amor que sientan por el propósito de la compañía.

Te invito a pensar si la actividad de tu empresa te llena de AMOR.

Un abrazo,
Nuria